Coincido bastante con sesilu en todas sus observaciones sobre la película, tanto las positivas como las no tanto: la obra es, desde luego, sumamente interesante, especialmente por la atmósfera que construye de soledad, opresión y desconcierto, que permea a todos los personajes apenas sin excepción, dejando un poso muy marcado de melancolía que me ha agradado; los personajes son también punto vital de la historia, y las interpretaciones de los dos adolescentes, sin ser extraordinarias, son creíbles y solventes. El problema está, como apuntaba sesilu, en la confusión narrativa que sufre la película, especialmente al principio, ya que apenas hay exposición y el espectador debe unir demasiados cabos por su cuenta. Probablemente, en un segundo visionado este problema será mucho menos aparente, pero al principio desconcierta un poco, ya que hay demasiadas elipsis y saltos que solo paulatinamente se van comprendiendo. El último acto de la película, por su parte, me ha resultado un tanto forzado. De todas formas, y pese a esto, la película me ha gustado bastante, y la considero al nivel de las mejores de su autor, así que me he quedado con un buen sabor de boca. La recomiendo sin dudarlo.