Vuelta a ver luego de años y años. En algún momento la pasaron en televisión y yo la grabé un vhs, junto con otras. Me dí cuenta que solo recordaba a un personaje y apenas una escena, en la que están ensayando de noche.
No recordaba que fuera tan larga. Me pasé las dos horas y media pegado a la pantalla. Acá aparecen ya más consolidados los elementos formales del mundo JZK. A los que me olvidé sumar en el hilo de Xiao Wu dos que son importantes: El baile y el teatro, o sea música, canto y baile. También se pueden ver estos elementos formales en la producción de Yu Lik Wai, en las pocas películas y cortos que dirigió. De él solo me queda por ver All Tomorrows Parties, pero a esta altura va a ser un milagro si la llego a ver por alguna parte.
Volviendo a esta película, la historia, que JZK dedica a su padre, está ambientada en 1980, así que vamos a confiar en el criterio del director para ambientar esa época.
Es un retrato buena leche, se deja fluír con naturalidad lo bueno y lo malo de esa época. Nuevamente estamos en una zona incipientemente minera de China.
Los protagonistas son un grupo de jóvenes de una compañía de teatro. Aparece nuevamente el actor de Xiao Wu, pero interpretando a otro personaje.
Me parece que la historia cuenta un momento de transición al parecer, entre lo que se venía dando en China y la penetración cultural lenta pero imparable de occidente, la música y los pantalones campana se cuelan entre trabajos, obras de teatro revolucionarias y campañas de control de la natalidad.
Parece ser que estamos en presencia de un momento en que las cosas empiezan a cambiar, la historia eterna, un mundo viejo que empieza a ceder ante otro nuevo que empieza a tomar su lugar, ya sea por esa influencia externa que empieza a colarse, ya sea por los caminos que toman las vidas de este grupo de amigos.
Habría que revisar la idea de que la violencia se coló en la última película de JZK, hay que ver esta película para ver la violencia que hay. Claro que en este caso, la violencia no aparece como respuesta a una situación, sino que la ejerce el Estado como forma de control.
Nota de color: Aparece Sanming, entrando a trabajar a la mina de carbón, en condiciones muchos consideraríamos inadmisibles. Otra nota de color, en un momento un desde un altoparlante se anuncia el pedido de captura que pesa sobre un delincuente de fuerte acento cantonés, de 24 años, llamado Yu Likwai
pequeña nota de humor.
Y el final bastante significativo, el padre tirado en un sillón, y el bebé jugando con la madre tan animado.
En todo caso, es un retrato melancólico de una época pasada, están esos otros elementos, la deriva, la desintegración, la ausencia en definitiva y ese viaje que o termina de concretarse si no a través de la ausencia de los otros.