Ya he visto Black line y es el polar prometido... La verdad es que es una película oscura oscura, en su fotografía, en su trama [el mundo de la prostitución y la droga]. Serie negra total, rodada con mucha clase, que remite más a Jean-Pierre Melville que a Seijun Suzuki. El montaje, rapidísimo [utiliza 80 minutos en contar una historia compleja, llena de personajes secundarios e infinidad de lugares y ambientes (yo no se, pero si esto eran películas de bajo presupuesto es increible como logran hacerlo)], el encuadre [como siempre, estos japoneses tienen un sentido completamente diferente al occidental de encuadrar... te ponen la cámara en los sitios más alucinantes], la banda sonora, la mezcla desvergonzada de estilos [desde nouvelle vague a expresionismo aleman puro y duro]. En fín, imprescindible... A ver que dan de si las otras dos, pero vamos, prometen...