¡Esos cocinillas!
Estupendo mediometraje, muy reconocible Kiyoshi Kurosawa, con esas mierdas insidiosas que te va metiendo en la cabeza, esa fotografía tan cuidada y ese tratamiento de lo extraño, de lo
unheimlich, que diría Schelling, de lo siniestro. No se le puede pedir más a 45 minutos.
Estamos de año bueno con Kiyoshi: además de esta, en breve va a estrenar un
remake de su propia
Serpent's path que dicen que está muy muy bien. Veremos. De momento, Chime mola todo.
Ah, si la vais a buscar, cuidado: parece que ronda por ahí una versión con audio inglés.