¡Esos allzineros con tendencia al magnicidio!
Demasiadas cosas buenas había leído del debut como director de Lee Jung-jae, y al final la peli se me queda corta. Tiene un buen nivel de gritos coreanos, un buen nivel de tiros y violencia, buen reparto, buen presupuesto, buena producción, buenos interrogatorios a hostias, pero... no sé, con eso no se resuelve todo. Yo creo que un poco más de thriller y un poco menos de acción le habría venido bien, que así hubiera explotado mejor el punto interesante que tiene: la paranoia de todos espiando a todos. Pero casi todo se resuelve con una acción que en definitiva tampoco es que sea especialmente espectacular o novedosa. Ya digo: un poco más de intriga, de tensión, hubiera potenciado más el resultado final.
Que pasas el rato, sí, pero no termina de atraparte; incluso hay algún momento un poco penoso... por incidir en las tortas en lugar de en la tensión psicológica. El recontrarrizo de la trama... pues vale, se va viendo venir pero les da para estirar la cosa.