Hablar de Koki Mitani, es hablar de uno de los mejores guionistas (y directores) del panorama actual de Japón. Viene del mundo del teatro y eso se le nota, pues sus historias suelen ser de escenarios contenidos y guión... Mucho guión. Desde su Welcome back, Mr. MacDonald (una obra maestra, no os la perdáis) hasta la que nos ocupa. ha mantenido siempre más o menos el nivel de calidad. En ocasiones a un nivel muy alto (como University of laughs -aunuqe sólo era guionista- o en el Hotel Uchoten) y otras igual con un nivel más bajo, pero no por ello malo (me vienen a la cabeza la del samurai fantasma, o the magic hour).
¿Y esta? Pues esta es maravillosa. Una de sus mejores. Guión de enredo, como suele acostumbrarnos, llena de personajes, cada uno con lo suyo, y encima rodada en un único plano. Una sola toma, sí. Pero de las de verdad, no de esas tipo Birdman o 1907 que venden lo mismo pero están completamente falseadas.
Una toma recorriendo el aeropuerto de Matsumoto de arriba abajo y de un lado al otro y con los actores hablando sin parar. Un ejercicio de cine y de interpretación maravilloso, en tono de comedia que es deliciosa tanto en su inicio, su desarrollo como en su conclusión. Una demostración de que con ideas muy sencillas se pueden contar historias muy buenas.
Mención especial para la prota, Yuko Takeuchi, que es la que nos hace de maestra de ceremonias durante los 100 minutos de la peli, que lo hace de cine, y que por desgracia ya no se encuentra entre nosotros.
Dedico la traducción a Psyduck, creador de la ficha
pero también a los sospechosos habituales fans de Mitani que se dejarán caer por aquí seguramente (sesilu, Battosai...). Ya nos diréis vuestra opinión.