Es un thriller con ciertos momentos de humor asociados al protagonista "legal" y algo de acción. En el apartado técnico, diría que tiene un buen montaje, y sobre todo un buen guión. La historia está bien hilada y se va desgranando poco a poco con pequeñas pistas sobre quién ejecutó los asesinatos, para que no parezca que se lo saca de la manga el autor. Por el contrario, la dirección no está muy lograda en las escenas de acción. Buena fotografía pero malos encuadres, supongo que para suplir una cierta carencia de medios. Louis Koo encaja muy bien en ese personaje duro y moralmente muy ambiguo. Me ha sorprendido ver en esa especie de cameo a Sam Lee tan gordo, caray cómo se ha puesto este hombre que antes era un tirillas.
La película reposa sobre un viejo tópico del cine de gangsters oriental, la fatalidad del destino. Desde el principio de la película se intuye que va a terminar así, pero el protagonista "ilegal" no puede evitar su destino. No podría dejarlo todo, hacer borrón y cuenta nueva y comenzar una nueva vida. Los acontecimientos le resultan inevitables. Me ha gustado especialmente la relación que desarrolla con su arrendadora, que nos hace ver que no todo es blanco o negro, ni nadie es totalmente puro y casto o abominable. Esto se muestra de casi todos los personajes, no se salva nadie de ser gris, aunque hay distintas gamas de grises, por supuesto.
Un robo en una joyería sale mal, hay muertos y heridos. A partir de ahí se producen más asesinatos, incluso entre los propios ladrones de joyas, y desaparece el botín. El líder de la banda se toma el asunto como algo personal y comenzará una investigación propia. Uno de los policías que investiga el caso empezará a dudar también de los resultados obvios. Ambas investigaciones transitarán por diversos sospechosos hasta descubrir que la verdad es todavía más sorprendente. Y además hay un loro testigo de uno de los asesinatos que parece que tiene algo que decir...
Me ha parecido muy buena y muy entretenida, si bien con una mejor dirección hubiera sido realmente sobresaliente. Ver.