Aunque no sea un película técnicamente muy dotada, la historia es bastante sutil, sin demasiados adornos o excesos y se va entretejiendo o desvelando poco a poco, los actores protagonistas están y se compenetran muy bien, además tiene el aliciente extra de que son padre e hijo en la vida real (que algo ayudará). Aunque se le etiquete como drama, también hay algunos momentos de cierta comicidad. Recomendable, sin duda.