Es que por momentos cambia bastante de tono y no se acaba de definir, ni de definir a los personajes bien ni sus relaciones, y casi toda la acción se acumula al final. Yo le tenía interés por Leon Lai, porque es uno de esos actores que caen en gracia y mira que ha hecho pelis infumables (coff, coff, Dream of a warrior, coff, coff). Desde luego que no es nada del otro mundo, pero para entretenerte un sábado por la tarde te da.