Gracias a Danyyyy.
Un film que empieza con alguna que otra escena subida de tono, sin saber muy bien como va a seguir; lo mezcla con la convivencia y las relaciones entre los protagonistas, donde en una buena parte del metraje no pasa nada interesante. Sin embargo, a raíz del episodio del antiguo amigo y cliente enfermo, la película pega un giro absolutamente bestial; si ya desde el inicio nos muestra un drama social bastante preocupante mediante el papel de prostituta mayor, a partir de este hecho se convierte en un drama (o dramón) tan genial como triste y deprimente, donde nos mete de lleno en el problema de la vejez y la soledad. Una interpretación de Youn Yuh-jung de las que marcan.