Parte de una premisa y un planteamiento atractivos en su primera mitad para pasar a continuación a enredarse paulatinamente en una espiral de acontecimientos dramáticos que bordean la inverosimilitud (cuando no coquetean con ella directamente).
Una pena que las dos mitades de la obra sean tan desiguales, porque podría haber dado mucho más de sí con un desarrollo más comedido y coherente de la trama. Aún así, se deja ver.