A mí me ha pasado como a la mayoría, empieza prometedor pero luego no llega a hilar prácticamente ningún argumento y llega un momento en que he pasado de seguir de lo que iba, si es que iba de algo.
Menudas dos peliculillas lleva el Maestro (ya menos
), la de Tokyo Tribe es insufrible, esta también pero por lo menos la duración es más amable con el espectador que desea que termine.
Además, cada vez que salían tomas de bragas (que será un fetiche fundamental de Sono, pero no mío), me sacaba más de la peli. Si te gusta ese tipo de fetiche, genial, pero a mí me parecen ridículas, o por lo menos me acaban aburriendo (en eso prefiero la insinuación).
Bueno, a ver si alguna de las otras es mejor, aunque empiezo a tener dudas, espero que no me pase como con Takeshi Miike, del que apenas veo nada tras el horror que me supuso ver los Izo y compañía.