Película dura. Siempre lo son aquellos intentos de mostrar los aspectos más oscuros de la psicología humana, no aquellos depravados o psicopatológicos, sino los que por cotidianos y por el amplio espectro de afectación sobre las sociedades (casi todos los que nos reconocemos como anodinas personas normales), se toman como un mal menor (la esperanza de muchos es tener la suerte de pasar al bando de los canes, aunque solo sea para recibir las sobras, pero con libertad de ejercer de tales con los despreciables chanchos que uno era antes. O, soñar con convertirse en algún momento en el Rey de los Cerdos, y llevar a cabo actos de justicia poética. Esta es la opción más atractiva para aquellos que, sin poder afirmar que es la justicia, si que odiamos, quiero decir odian las injusticias. Y creo que la expresión poética se podría justificar, ya que lo Reyes de los Cerdos dan unos matices de color esperanzador a un cuadro muy lúgubre, aunque sea con tonos bermellón de sangre). Siendo esos aspectos psicológicos alienantes, desesperanzadores, y el caldo de cultivo para los otros, los que dan protagonistas de guiones espectaculares de comportamientos antinaturales, de crimenes atroces que tanto nos gusta de disfrutar por lo sorprendente, éstos nos pulsan la alarma de vernos reflejados, a la gran mayoría, como Babe, pero no tanto como el valiente, sino como el dócil que se resigna camino del matadero. Y ésto es lo que, bajo mi miope punto de vista, la hace una película tan dura, de la yo si creo que la decisión de la utilización del estilo gráfico y de animación, que nos resulta chocante, casi anacrónico, como si pensaramos en carencias de medios para conseguir algo mejor, es intencionada, pues creo que se ha pretendido dar más importancia al argumento, que al medio de transmitirlo (a nadie se le escapa que, igual me equivoco, la animación coreana no se la debe considerar una animación emergente, solo hay que ver por ejemplo "Wonderful days" y lo que supuso para ese momento, o ver los titulos de crédito de obras niponas, y comprobar cuantos caracteres coreanos hay en las secciones de grafismo y animación).
Para acabar, y como corolario, decir que para aquellos que piensen que quizá la referencia de mi querido Babe no venga al pelo, creo que sí, ya que es la mejor historia que transmite; "ya nazcas cerdo o perro, o lo que sea, podrás intentar ser lo que quieras siempre que que bases tus intenciones en terminos de bondad, justicia,solidaridad...".
Algún perfeccionista dirá vaya, contradicción al canto, en la que nos ocupa ¿no habría que evitar el camino de convertirse en perro, ya que son la base de la injusticia?, ¿Babe no quería ser un perro ovejero?, ¡uy!, ¡uy!. Pues no, no hay ninguna, son perros diferentes , collares diferentes, fines diferentes. Y bueno, esto habría que explicarlo, pero no creo que el que se haya tragado este rollo, me anime a seguir escribiendo
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Hacedme caso, si quereis claro está
, ved la peli, es genial no os sacará ni una intención de sonrisa. Y después, para no perder la esperanza del todo, y emocionarse hasta el llanto bobalicón, ved "Babe, el cerdito valiente".
. Saludos a tod@s.