Genial película. Apoyo más la postura de los que se han rendido a su naturalidad, al realismo en transmitir unas situaciones cotidianas, además en un país donde hacerlo pues, parece un poco complicado.
Para mí el cine es entretenimiento, denuncia, estímulo,.., en definitiva es vida, cubre todos los aspectos que se nos pueda ocurrir, con resultado de factura unas veces mejor, otras peor, y bueno otras como decía aquel, infumable, pero ahí entra el gusto variopinto de los que lo disfrutan o lo sufren. Con ésto quiero establecer los principios en los que me baso para atreverme a opinar sobre esta película. Mi bagage en conocimientos tanto técnicos como historiográficos del cine es más bien bajo, conocimientos que admiro, me hacen aprender y agradezco a aquellos que valoran esta obra según los mismos. Yo la analizo por ella misma, y lo que me hace sentir, intentando no caer en comparaciones, que como se suele decir son odiosas, aunque siempre cuesta no hacerlo.
Reprocharle que no ofrece nada nuevo, o que lo plasmado no se haya expresado ya y mejor es un poco duro y puede desanimar a alguien a verla ( cine iraní, casi dos horas, uy! rollo al canto). Yo lo veo de la siguiente manera; todo está ya dicho y expresado, solo cambia la forma de hacerlo (una de las grandezas del cine es que aun pensando asi, siempre aparece cada x tiempo algo que te sorprende y maravilla), y ejemplos de ello los hay casi todos; qué hace de "Los Siete Samurais" una obra maestra, no será su originalidad, o de "Casablanca", o de..., y en cambio no nos cansamos de verlas, hasta nos sabemos sus diálogos. Entonces cual es el secreto, qué nos muestran de novedoso que no se haya hecho antes. Si me permtiis una comparación gastronómica, yo lo veo como los guisos de mi Madre, cada uno de ellos siempre lleva los mismos ingredientes, siempre son diferentes, y siempre me gustan (menos cuando alguno se le quema un poquito, o a otro se despista y le echa doble ración de sal). Se que hay Madres que cocinan mejor que la mía, las hay que lo hacen peor, intento entender qué les falta a éstas, y qué mejoran las otras, pero siempre disfruto de comer en casa. El cine igual, mismos platos, mismos ingredientes diferentes toques, si te pulsan la fibra o valoras lo que te transmiten, pues se convierte desde bueno hasta obra maestra, si no, o si se quema, desde normal a bodrio. Y basándome en estos sencillos principios me alinéo con los comentarios más entusiastas, los cuales recomiendo volver a leer ya que son muy acertados y no creo que yo pudiera aportar nada mejor. Solo añadir que en esta película además de que todas las interpretaciones son buenísimas, las circunstancias (Irán, la religión, la justicia institucional) las veo no como algo estático, omnipresente y omnipotente, sino como un personaje más, que varía según el devenir de los acontecimientos. Y así, por ejemplo, no creo que se pueda decir que la religión quede como implacable vencedora del designio de lo que acontece, sino que es resultado de la interacción de cada personaje y sus circunstacias con los demás y las suyas, quedando a merced de cada cual. Lo cual no quiere decir que no se deje sentir su presión y opresión constantemente, aquí yo me mojo, ¡ojalá! no solo en Irán sino en todo el mundo desaparezcan las religiones (bueno menos la del cine, que viendo películas como esta nos debemos convertir en mejores personas. Si el comentario lo estimais inapropiado, pues tijeretazo que no es mi intención molestar).
En fin que lo que queriá dejar claro es que mi visión de la película es un trabajo sobre la naturaleza humana, con unas circunstancias concretas, que cada personaje brega con ellas, y que ello hace que la realidad de cada uno y la general no sean tan fácil de enjuiciar, sino que impele a empatizar con cada uno de ellos y tratar de entender.
Una cosa más, creo que no se debe tomar como referencia quien premia o no, el premio lo debemos dar cada uno (aquí también me mo.., me empapo, no me gusta nada el sistema ee.uu, ni la oligofrenia que promueve).
Cuando uno ve una orquídea se maravilla por su complejidad, cuando uno ve una amapola se maravilla por su sencillez. Cuando veo "Dolls" me maravillo, cuando veo "Jodaeiye", también. Y es porque como en la mesa, disfruto de la emoción de lo cotidiano, y no quiero cansarme de emocionarme. Ni tampoco de quedar boquiabierto por lo extraordinario.
Siento haberos causado
y
, es lo que tiene el atrevimiento del insomne
. Saluudos a tod@s.