No me ha gustado. Me da pena por Jia, pero parece que ha hecho una película "pa comer". Está llena de forzadísimos "momentos Jia", como si quisiera dejar bien claro que la película es suya, pero casi siempre son injustificados. La presencia de Zhao Tao es uno de ellos. Al principio parece que tendrá su propia historia, como en 24 City, pero nada.
Es un documental más al uso, así que carece del juego de 24 City. Eso sí, hay grandes testimonios, como los del tío que participó en el rodaje de Chung Kuo, y se pone a recordar cosas sobre la película, sobre la libertad que le dieron a Antonioni y sobre lo mal que se sintieron los líderes del PCCh cuando vieron la película.
Y también son muy hermosos los testimonios de cineastas y actrices. Especialmente, la aparición de Hou Hsiao-hsien. Ahí Jia lo tenía fácil para cautivarme, porque prácticamente son mis dos directores favoritos de los últimos años, pero es realmente hermoso. Un viaje en tren con Hou para todos los que hemos crecido (como cinéfilos) con sus películas, es muy emocionante. Rememora el inicio de Dust in the Wind, y aprovecha la oscuridad de un tunel para transportarnos a Flores de Shanghai... una elipsis arrolladora, hermosísima, que tiene más del cine de Hou que del de Jia...
Y en fin, que la película se mueve entre cosas tan bonitas como esa y en la melancolía más rancia, en la estética de postal o en un humanismo bastante pobre. Dejando el conjunto en la total arbitrariedad. Pinta mal el futuro para el cine de Jia.