Completando la sesión doble que dedicamos al juego y, más concretamente, a los casinos (ya tocarán otras variantes), aquí tenemos Gambler's delight, protagonizada Danny Lee (y de paso volvemos un poco a él), además de viejos conocidos como Wong Chung. enfrentado aquí a Chen Ping, en el papel de una turbia jugadora metida en un extraño grupo mafioso japonés. El caso es que la película ya empieza de una manera osada, pero lo cierto es que va ganando progresivamente en surrealismo, desnudos gratuitos (hemos visto desnudos gratuitos vale, pero como los de esta película yo creo que nunca... No os perdáis los números de magia y riesgo precisamente de Wong Chung... a ver quién da más...) y barbaridades varias, que la convierten en un bonito resumen de los delirios de la Shaw por aquellos primeros ochenta, en los que no sabía ya muy bien lo que hacer para no irse a pique. Aquí lo prueba todo, incluyendo la acción. Ching Gong también se las sabía todas (por andar anduvo hasta en la primera The criminals) y no se deja nada por frecuentar, convirtiendo a este Gambler's delight en un monumento al desparpajo, frente al que sólo queda sentarse y dejarse llevar, de sorpresa en sorpresa, de barbaridad en barbaridad, como en un circo moderno de innumerables pistas...