Además de su originalidad, a mí me funcionó muy bien. Incluso le pillé el ritmo al Shirin que ellas están viendo y yo escuchando. Eso sí, soy consciente de que hay que verla con ganas y sabiendo lo que se va a ver, de lo contrario puede hacerse bastante cuesta arriba. Es curioso como incluso entre las propias espectadoras se percibe por momentos el aburrimiento
Es más, rizando el rizo... ¿os imagináis que alguien nos estuviese grabando a nosotros mientras vemos a estas mujeres e hiciese otra película con ello? ¿Cómo de distinta sería con respecto a esta?
En mi opinión, posiblemente sea lo mejor de Kiarostami hasta la fecha y, si no fuera por la Binoche (más que nada porque no pinta nada) le hubiese puesto un 'obra maestra' en la escuesta. En cualquier caso, imprescindible alto.