Las traducciones de películas asiáticas hay que enviarlas al correo de Allzine: subtitulos@gmail.com .
Creo que ahora se envían a allzine(arroba)gmail.com
Pues nada, lo dicho, ayer, bien entrada la noche, acabé la traducción y envié los subtítulos a la dirección que menciono.
Antes que nada quisiera hablar del ripeo: como decía
Silien, supongo que la calidad del DVD tailandés no sería muy buena, porque es una pena que el ripeo, pese a tener un tamaño considerable (1,46 GB), no se vea muy bien. Supongo que no dependerá tanto de
Silien si el material base sobre el que trabaja es de por sí malo. Lo digo porque hay ciertas escenas, en concreto las oscuras (que son muchas), en las que se percibe un incómodo bailoteo de píxeles; y también las escenas del bosque, donde las imbricadas texturas de sombras, luces, ramas, árboles, no se aprecian del todo bien, y el resultado es una amalgama un tanto confusa de todas esas texturas.
Pero repito, no creo que esté en mano de
Silien si ni siquiera con 1,46 GB se ha logrado que la codificación y compresión pase desapercibida: el problema estará en el material base. Habría que encontrar (o esperar a que salga) una mejor edición del DVD.
Bueno, a lo que vamos: la película. No soy un gran conocedor de la obra de
Pen-Ek, tan sólo he visto
6ixtynin9,
Invisible Waves,
Ploy, y la ahora comentada
Nymph. Por lo que veo, cambia de registro de forma un tanto radical, y eso me gusta. Me gusta el manejo agitado de la cámara, esa mezcla de steady con cámara al hombro. Me gustan también los sonidos y la música atmosféricas. Me gusta la iluminación. Me gusta el tono de las imágenes, que me hicieron acordarme de la estupenda
Ploy.
El envoltorio le da un aire cálido, sutil, a la película, un tono sosegado que acompaña al devenir de la historia, por otra parte muy en la línea de
Pen-Ek.
Existe una historia, que es interesante; y también existe el modo de contar esa historia. Aún así creo que esta película tiene un problema, y ese problema radica en la imposibilidad de identificarse a sí misma; esto es, todo se queda en el limbo: ni la historia pasa de ser algo meramente interesante y llegar a fascinar, ni la factura alcanza una atmósfera lo suficientemente convincente. Entonces se queda corta por ambas partes. Y claro, ni crean que van a ver una película de terror, ni de fantasmas, ni de nada, está fuera de los géneros. Acaso el intento de clasificarla se quedaría en
drama intimista con leves toques de thriller semi-fantástico.
Pese a todo, hay planos de inconfundible belleza, y otros, que por su complejidad, impresionan, como el tan mencionado plano-secuencia que abre el film, que empieza con steady y acaba con grúa (me gustaría ver cómo se rodó ese plano, creo que existen unas steadys con grúa incorporadas).
Lo dicho, le falta algo, creo; aún así, como mínimo, lo valoro de forma positiva como ejercicio experimental personal del director en un intento de recliclarse.