Bueno, después de unos años he vuelto a verla e, igual que la otra vez, me ha parecido muy entretenida y básicamente tronchante
Me pasa igual que con La chinoise de JL Godard, aunque aquella es mucho más pop visualmente y en la verborrea allá el sociosurrealismo deviene prepsicodelia
mientras que esta de Oshima es más bien una especie de dadarxismo dialéctico
en noir Huy qué peligro tiene eso que escribió aquí arriba Janusz; porque no está ya, que si no le contestaba
Y creo que con esto soy el primero que propiamente (!) comenta esta película en 13 años que tiene la ficha
Bueno, aquí arriba
acbarra habló de los problemas médicos que le generó el visionado, extrayendo como conclusión paradójica que una peli que produce cefaleas sería un buen dormitivo (
), toda vez que
maurazos, compartiendo más o menos esta opinión por el lado guionil, se refugió en un par de comentarios técnicos. Por cierto, por ahí la he visto comparada con los planos largos de Mizuguchi, mientras que a mí no me dejó de recordar –las dos veces– a
La Soga de Hitchcock..., aunque aquí los flashbacks a ratos nos sacan de esa opresiva sala. Lo de los flashbacks es de lo que más me inquieta: la acción presente tiene lugar en otoño de 1960, se comentan hechos del verano, las protestas contra el tratado de marras, pero es que luego se van a la guerra de Corea y con más precisión 1952: ¿cuántos años se tiraban haciendo la carrera en Japón y qué edad tienen estos estudiantes?, no dejo de preguntármelo, porque me creo que haya un par de repetidores irredentos y reincidentes, pero es que prácticamente la tropa entera comparte los mismos recuerdos y luchas
Tengo que decir algo de los subs. Esta segunda vez me pareció que las barrabasadas dentro de la verborrea de marxismos en discordia a ratos llegaban a ser excesivas, por lo que comparé con los ingleses, que eran incluso peores por momentos. Ahora que me he estado leyendo la odisea de Raphus Lee empiezo a entenderlo mejor. La noticia es que en subscene encontré unos subs franceses que son mucho más coherentes y no dan ese tipo de disgustos. Opté por ellos, claro. Ahora que he leído esto, entiendo el mérito que tuvo la labor de Raphus hace diez años, pero quizá estaría bien una nueva versión...