Yo también la acabo de ver, y bien, es una buena película pero ya está. Tampoco creo que pretendiera ser nada más, y sin el oscar hubiera pasado más bien desapercibida. Entendámosnos, es una película que tiene todo lo necesario para que le den un oscar (o al menos para que la presenten), pero que ni en broma puede considerarse lo mejor del año japonés, se coja el año por donde se coja. Kore-Eda, Kiyoshi Kurosawa, Takeshi Kitano, Naomi Kawase, Hayao Miyazaki, etc. están a años luz con sus películas de ésta (sentimientos aparte... aunque precisamente, en esa liga juega, la del sentimentalismo, con lo cual si la desproveemos de ellos...). Y ya ni que decir tiene con respecto al cine asiático. Pero bueno, cosas más extrañas hemos visto.