Esta película formó parte de un ciclo sobre Yuen Biao que hicimos en ZinemaHK hace ya más de una década. De modo que pondré el comentario que hice sobre ella en aquella época.
No se me van a caer los anillos por decir que esta película me pareció ¡UNA PUTA MIERDA! Así, con todas las letras. Es la segunda parte de "Peacock King", que era malilla pero con alguna que otra escena divertida. Ésta no. Ésta directamente es un truño de proporciones épicas.
Para no desanimar mucho al personal, no la reventaré, solo le daré un pequeño repasillo.
La película continúa donde lo dejó la primera parte. Ashura, que es la hija del demonio, vive ahora en la tierra haciendo... haciendo nada, en todo caso la capulla, dando vueltas y rascándose la barriga. Pero sus días en la tierra están contados porque va a desencadenar el apocalipsis y en el infierno pretenden raptarla para que todo se produzca con mas celeridad. Para protegerla están sus antiguos amigos, Peacock (Yuen Biao) y Lucky Fruit, quien esta vez está interpretado por otro japonés, Hiroshi Abe. También recibirán la ayuda de 3 sacerdotisas, a las que yo llamo "Las supremas de Mostoles", y que, la verdad, ayudar, ayudan poco, y unicamente muestran cacho. Ya puestos, un cañonazo de puchero no les habría venido nada mal. No nos olvidemos de la mascota de Ashura, un bicho demoníaco bastante travieso y mas feo que un frigorífico por detrás. He de decir que el muñeco es lo mas cutre en la historia de los efectos especiales del universo conocido. La protagonista sigue siendo Gloria Yip, y sus dotes interpretativas no han mejorado desde la primera parte. Su única baza es su cara aniñada y alelada, que seguramente haría las delicias del público masculino japonés.
Por la parte infernal tenemos a la concubina del demonio y a sus secuaces, una mezcla entre Eduardo Manostijeras y Lobezno, que no paran de incordiar a la pobre muchacha durante toda la película.
El maquillaje es horrible. Las estatuas-perro que cobran vida al inicio son tan ridículas que os harán vomitar. Por no hablar de los patéticos zombis que se les unen a los dos minutos. La acción esta completamente basada en el cable y no vemos ni una triste patada dada a derechas. La prota es insufrible, tonta a mas no poder. El bicho hace que te entren ganas de empalarlo en una lanza de lo penoso y estupido que es. Y lo mejor de todo es que a Yuen Biao, cual Han Solo en la carbonita, lo congelan en la primera media hora de pelicula y nos privan de su presencia el resto del metraje, y a partir de ese momento te dan ganas de pasar una cuerda por la viga mas cercana y ahorcarte. Unicamente se salvan los rayos y ondas vitales que lanzan, pero el resto es para echarlo a la basura.
Esta película es como en "Scanners":
A los 10 minutos comienza el dolor.
A los 20 minutos no puedes respirar.
Cuando congelan a Yuen Biao, tu cabeza explota.
No esperéis nada de esta película. Es mas, la peli os robara vuestro tiempo y vuestra alma.
El genero con monstruitos tiene mucho éxito en Japón, y esta saga tuvo buena acogida allí, cosa que no ocurrió en Hong Kong, donde se pego un batacazo, ya que como decia Yuen Biao, en Hong Kong no están hechos para este tipo de cine y no les gusta.
Resumiendo: huír de ella como alma que lleva el diablo.
