Ya que perroloco ha reflotado el hilo... que sepáis los interesados que de esta tengo el DVD, y sacaré a corto plazo un ripeo limpio y con subtítulos en español
¿A corto plazo? We're still waiting...
Ésta la descubrí, como la de
Heaven and Earth (1990) que acabo de comentar en su correspondiente hilo, gracias al revoltijo de la «retro de chambara». ¿Una guerrer
a legendaria de la época por excelencia de los Warlords (señores de la guerra)? Interesante
y, por inaudito, sospechoso de consistir en una de esas fantasías con chicas guerreras (uh, ah, las chicas son, como decían los Coz
) que tanto se estilan hoy por hoy. Si estuviera aquí don Fingo nos reiríamos un poco comentando que otra chica, o chico que firma como chica, nuestra querida
Paghat the Ratgirl, dedica una
página a esta Tsuruhime poniendo la película a parir –aunque se le va un poco la mano en los detalles– y añadiendo que es «historically absurd». Y aquí está el chiste: como le ocurre con frecuencia, Paghat se pasa de lista, porque resulta que lo que cuenta esta película
sí que tiene base histórica (con parte de leyenda, pero leyenda histórica en todo caso): hubo una Tsuruhime real que, por falta o defunción de los otros aspirantes, tuvo que hacerse cargo de las labores sacerdotales de su padre y convertirse en guardiana de Omishima y del Mar Interior, lo cual condujo a que dirigiese unos cuantos combates navales contra los otros personajes históricos que aparecen en la peli (Sue Harukata, los Ouchi...) y terminase uno de ellos tirándose al mar y desapareciendo para siempre. (La leyenda real es un tanto distinta, pero no del todo, de lo que se cuenta en la peli.)
O sea que su interés histórico es real. Hay que añadir –creo que no se ha dicho aún en este hilo– que originalmente esto era un telefilm de la Nihon Terebi, lo que explica su similitud estructural y estilística con las típicas miniseries de «Warlords». La joven protagonista Kumiko Goto fue en su momento una idol (aunque su carrera cantante fue mucho más breve que la cinematográfica) que tiene el honor de haber salido en cosa de cinco Tora-sanes tardíos (en calidad de novieta del sobrino de Tora) a caballo entre los ochenta y los noventa. Su papel de «tomboy» no lo hace mal, esto hasta se lo reconoce Paghat en su destructiva reseña, que arremete ante todo contra el guión pero protesta sobre todo por la poca acción que se le otorga a la protagonista. Paghat, como decía antes, exagera un poco, pero no le falta razón en ciertos aspectos, como lo falso de pretender que la sociedad de la época –años 1530-1540– impedía y reprimía los impulsos guerreros en las féminas, siendo así que, por el contrario, a las jóvenes de familia samurái se las entrenaba en la lucha con lanza, con cuchillo y otras, y muchas de ellas terminaron en efecto como guerreras de batalla cuando no defendiendo el hogar cuando los machos salían de «caza». Ese aspecto del guión es, pues, un abuso histórico para llevar la lucha feminista contemporánea al sengoku
Tomando como referencia que se trata de un telefilm al estilo de los jidais televisivos «Warlords» de su época, uno no tiene que hacerse demasiadas expectativas desde el punto de vista cinematográfico. Incluso comparte ese punto plomizo que aqueja a muchas de esas películas: por fortuna, ésta no dura cuatro horas, sin llegar a las dos y media. Por otra parte, a diferencia de las miniseries de la TBS, ésta no cuenta con estrellas del cine clásico sesentero, exceptuando a Minoru Oki en pequeño papel. Aparece también Daisuke Ryu (el hijo «azul» de
Ran) haciendo de megamalo.
En fin; no es para tirar cohetes, pero es interesante, introduce la novedad de una jovencita Señora de la Guerra (y del Mar) que resulta exótica en el océano de películas sobre el Sengoku, y generalmente es entretenida, a pesar de los muchos momentos soporíferos y lo confuso de la narración histórica recargada de datos.
P.S. Ah, yo sólo la encontré con hardsubs, o sea que no estaría mal si el Sr. Fingo algún día reapareciese y cumpliese su promesa