jidaigekipedia.comLas tres piezas del puzzleHiroshi Inagaki, el gran maestro del jidai, repite el exitoso dueto que hizo grande a la trilogía
Samurai. Me refiero por supuesto a Toshiro Mifune (que fue Musashi) y a Koji Tsuruta (Kojiro Sasaki), ahora convertidos en hermanos y aliados ninja en las dos partes de
Yagyu Secret Scrolls.
Sinopsis: Tasaburo y Senshiro son dos hermanos ninja a los que se les ha encargado reunir los 3 pergaminos secretos del clan Yagyu. En esa labor tendrán que competir con otros clanes, ya que cada cual pretende utilizar las reliquias con un objetivo diferente. Como todas las ecuaciones dan como resultado un gran daño para la familia Yagyu, ésta tendrá que valerse de Tajima, Jubei, Matajuro, Tomonori, y Oki, para salvar el peligro.
Uno de los títulos por los que se conoce a esta obra es
Ninjitsu, aunque yo no la consideraría dentro del género ninja. Puede que Mifune y algún otro protagonista sean ninjas, pero la historia y los combates son de samuráis. El que se deje ver de vez en cuando alguna técnica shinobi, algún salto, o algún otro detalle por el estilo, no convierte a la película en nada que se parezca a
Kagemaru of the Iga Clan,
Torawakamaru, the Koga Ninja,
Owl's Castle, y demás ejemplos puros de ese cine.
Como siempre, me gusta saber el año en el que transcurre la trama de la forma más exacta posible. En esta ocasión sabemos que el Shogun es Iemitsu (porque es del tiempo de Jubei Yagyu), pero concretamos más gracias a Hikozaemon Okubo, que por el hecho de seguir vivo ya nos encuadra la historia entre 1633 y 1639. El otro personaje histórico con papel protagónico es Nobutsuna Matsudaira (Izu-no-Kami), que por esas fechas ya había sido nombrado roju y gozaba de gran autoridad.
En cuanto a mis valoraciones personales, desde luego no la veo a la altura ni de
Samurai, ni de los principales trabajos de Inagaki. Una muestra de que el proyecto no fue tan ambicioso está en la banda sonora, que siempre caracteriza por su fuerza a las películas del director. En esta ocasión me ha pasado bastante desapercibida. Además, no sé si habrá sido cosa del DVD, pero en la parte final no he podido dejar de pensar en lo mucho que se nota que todo el sonido viene del estudio y no de la escena.
En cualquier caso, y por crítico que haya sido, es una película bastante interesante y posiblemente un imprescindible del género. La comparación con otras obras maestras de Inagaki le puede hacer bastante daño, pero desde luego la vamos a disfrutar todos los amantes del director.