jidaigekipedia.comEl monstruo apaleadoPrimera película a color de la colección, primera de las dirigidas por Tokuzo Tanaka, y primera de las rodadas en 1963. De todo esto está claro que la entrada del color es el detalle mas importante, ya que sin bien nos quita parte de su encanto a los amantes del blanco y negro, no podemos negar que el detallismo es mucho mayor.
Lo primero que quiero decir es que si ya de por sí me sorprendí con el sentimentalismo de la segunda parte, con esta no tengo palabras. Hay un par de escenas, la de los dados y la de los insultos del maestro, que son realmente demoledoras. Esa combinación de drama y acción convierte a
New Tale of Zatoichi en una interesante elección dentro de la saga. Otros títulos por los que es conocida son
Zatoichi Enters Again y
The Blind Swordman´s Return.
Nuestro protagonista regresa a sus orígenes, donde se reencontrará con amigos y conocidos del pasado y nos descubrirá alguna que otra sorpresa. Durante la película tendrá que hacer frente al hermano de Kambei (muerto a manos del espadachín ciego en la entrega anterior), y a una misteriosa banda de ladrones que se hace llamar Grupo Tengu.
Aquí Zatoichi vuelve a encontrar el amor, y parece que el éxito que tiene entre las mujeres es inverso al que tiene entre los hombres, aunque también lo es su actitud ante este hecho. Los hombres habitúan a increparlo y a burlarse, lo que le ofende y le enfada; las mujeres en cambio le tratan de forma amable y es él quien se autoproclama como “lisiado” o “impedido”. En esta ocasión su relación con la hermana del sensei va mas lejos que las anteriores, estando a punto de casarse y de renunciar a todo.
Tenemos una importante incongruencia con respecto a la primera entrega, en la que Zatoichi afirmaba que había aprendido a emplear la espada por su cuenta. Ahora se nos dice que tuvo un maestro, con el que vuelve a reencontrarse después de varios años para descubrir lo mucho que ha cambiado.
Otra curiosidad es que ya comienza el film con su bastón-espada, aun cuando en
Zatoichi 2 lo había lanzado lejos antes de huir. Ese factor es aprovechado por el director para mantener el arma oculta al espectador hasta que se hace necesaria.
La canción de Shintaro Katsu en la posada es también interesante. Con unos toques de humor nos hace ver cómo se siente al ser ciego y vivir como masajista, y también responde a las dudas sobre su nombre. De acuerdo con la información que he encontrado, el prefijo “Zato-” se utiliza a modo de “mister” o “señor” con las personas ciegas.
Alrededor de 90 minutos para este genial film de Zatoichi, con otra estupenda actuación de Katsu y un fuerte toque de drama en algunos momentos muy concretos. Maravillosa, y por supuesto recomendable.