jidaigekipedia.comLos tres dioses de la muerteSinopsis: Itto Ogami continúa su viaje trabajando como mercenario de categoría, mientras los Yagyu buscan apoyos dentro de la familia para eliminarle de una vez por todas. La ayuda les llegará de la sección de ninjas Akashi-Yagyu, formada integramente por mujeres. Además de hacerles frente, el lobo solitario tendrá que llevar a cabo una nueva misión que le enfrentará con tres de los asesinos más despiadados de Japón.
Babycart at the River Styx mantiene el mismo esquema de desarrollo que su predecesora, pero consigue amenizar (y de qué forma) una trama plagada de acción y sorpresas. La historia comienza con su habitual enfrentamiento con los Yagyu y termina con el cumplimiento de su misión. Destacan las continuas emboscadas de las kunoichi a Ogami, a las que responde siempre de forma espectacular y dando como resultado preciosos fotogramas. También llama la atención la utilización del sonido que hacen los mendigos con sus metales, transmitiendo al espectador la sensación de constante acecho que tiene nuestro protagonista.
Esta película bien puede ser de las más sangrientas de la saga y del chambara. Se hace un uso de la sangre increíblemente exagerado, muy por encima de otros títulos de cine samurai como
Azumi o la
Zatoichi de Kitano. Brazos, piernas, manos, dedos, cabezas... cualquier parte del cuerpo sirve para dedicarle unos segundos de cámara una vez se ha seccionado del cuerpo. Si no fuera por el escaso realismo que ofrecen los medios de 1972 estoy seguro de que a más de uno le costaría mantener los ojos fijos en la pantalla.
El carricoche de Daigoro cada vez tiene menos que envidiar a los coches de James Bond, ya que casi todas las piezas que lo componen terminan transformándose en lanzas y cuchillos, sin olvidarnos que incluso puede utilizarse como vehículo anfibio. Gracias a esta "plataforma de combate" podemos ver variadas coreografías de Tomisaburo Wakayama con katana, lanza y naginata. El actor, siempre estupendo en esgrima, nos deja un par de detalles de exquisita factura: el rápido desenvainado con la mano izquierda al mismo lado de la funda, y su elegante envainado característico con un giro de la hoja.
Algunos la consideran la mejor de la saga; yo por mi parte me conformo con decir que es bastante superior a la primera entrega, siendo la desaparición de Retsudo Yagyu (un enemigo ridículo que en mi opinión carece de carisma) el factor que más ha contribuido a la mejora.