Pues con esta película me ha pasado como a Alexei. La he visto después de La gente del arrozal y la considero superior, me ha gustado más. Es cierto que pese a no llevarse tanto en el tiempo, tienen un algo que las hace diferentes (más allá del campo - ciudad, de lo atemporal a lo contemporáneo). Y también algo que las une. Digamos una visión documental de la ficción, aquí al punto de mostrarnos la película como parte de una entrevista a una de sus protagonistas.
El caso es que la película es tremenda. Podría remitirnos un poco a Cyclo, en el sentido de volver sobre esas sociedades salidas de la guerra, pero esta es más inmediata, menos poética. La reflexión sobre la situación de la sociedad camboyana está presente en cada instante, en las palabras de sus múltiples protagonistas y también en sus acciones. Esa falta de futuro (si no tienes dinero no lo tendrás), ese desprecio por la vida, esa miseria continua que habita en edificios ruinosos y hasta en vagones abandonados. Una sociedad atormentada por sus recuerdos, por veinte años de guerra. Y Panh lo muestra con habilmente, sin indicir en nada pero estando en presente en todo momento.
Una pequeña joya, como decís, sin duda.