Pues ya la he visto. Creo que estamos ante la primera gran película hongkonesa del año (vale, es del año pasado, pero nos entendemos...). Esperaba mucho de ella y no me ha defraudado, y eso no es poco...
Al parecer el título original de la película es "Padre", y precisamente es ese el tema que atraviesa toda la película, la relación de un hijo, de un crío, con su padre, un jugador que ve como todo su mundo, ya de por sí bastante precario, se desmorona, y empieza una deriva en caída libre. Es curioso ver como en los últimos tiempos los directores hongkoneses están desplazándose, abandonando Hong Kong. Exiled e Isabella en Macao, ésta en Singapur,... No sé, es un movimiento extraño que traslada una cierta melancolía a todas estas películas... En todas flota un sentimiento de pérdida...
Patrick Tam construye una película que discurre (literalmente) entre ese estado de deriva y pérdida y entre la violencia de los sentimientos. Y para hacerlo rueda como nunca a un actor en estado de gracia que es Aaron Kwok, que realiza el papel de su vida, creando un personaje límite, agotador, en una de las que estará sin duda entre las interpretaciones del año... Y además, se coge al señor Mark Lee, y este le construye una fotografía de antología, como las que realiza por otro lado para Hou Hsiao-Hsien (es su director de fotografía de toda la vida... pero también el de In the mood for love, Pleno verano, Primavera en una pequeña ciudad,...). Y por si fuera poco, el propio Patrick Tam se ocupa del montaje y despliega en él un bueno número de recursos que dotan a la película de un extraño dinamismo (y es que este señor es el montador de Election, de Ashes of time, de Days of being wild). Y por si no tenemos bastante el mismo se ocupa de seleccionar una inspiradísima banda sonora, que no falla ni en su música original (del compositor de Election 2) ni en la música buscada para la ocasión ni en el uso que hace de ella...
En fín, eso, que estamos ante una película grande, que seguramente también dejará frío a más de uno, pero eso formará parte de su grandeza... Y ahora sólo nos faltan unos subtítulos en nuestro idioma, de modo que Lordvampir, anímate
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