Pues he vuelto a ver Dong, esta vez con los excelentes subtítulos de Kairo
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Y bueno, me ha causado un buen número de extrañas sensaciones después de Still Life... Creo que Dong es una película sobre la deriva, sobre el movimiento de los cuerpos, de la gente, su desplazamiento. Y creo que en buena medida, el cine de Jia Zhang-ke está asentado sobre esa deriva, sobre esos cuerpos desplazándose, y también sobre un cierto deslizamiento progresivo hacia la tristeza que sufren sus personajes...
Ese movimiento, en el cine de Jia Zhang-ke se refleja a su vez con la cámara más sutil, más tremenda que tenemos en el cine actual... Es un lujo verle desplazar la cámara... Valdría la pena ver una película suya abstrayéndose completamente de todo por ver como la desplaza, como logra imprimirle una vida extraordinaria, que no se basa en técnicas de vídeo músical, ni en complejos planos secuencia, ni en la búsqueda de una realidad, sino más bien parece que se mueve siguiendo su inspiración... y así vemos como en momentos es tremendamente inquieta, en otros se queda completamente detenida, suspendida, como gira alrededor de los cuerpos y las cosas, como busca las distancias, siempre con una inquietud asombrosa, acompañado por un sentido del montaje (del tiempo, de la duración) único...
Liu Xiaodong habla de restituir la dignidad a la gente, y hay mucho de ello en el cine de Zhang-ke. Y habla de buscar la verdadera esencia del mundo asiático por encima de las influencias extranjeras que le son extrañas. Y también hay mucho de eso, de esa búsqueda. Dong, se convierte así en un cuaderno de reflexiones de Xiaodong, pero también lo es del cineasta... Esto quizás resulta más evidente en la primera parte, en las Tres Gargantas, pero lo cierto es que conceptualmente se extiende al resto del documental... E incluso hay un rigor en esa propuesta... En que, por ejemplo, Still Life no muestre nunca a Liu Xiaodong (aunque atraviese buena parte de la película), pero Dong si que muestre planos de Still Life...
En fín, una pequeña joya, reveladora y misteriosa a partes iguales... Y como curiosidad, en los títulos de crédito, el agradecimiento a Wang Xiaoshuai...