Una conmovedora historia de un padre dispuesto a todo por su hijo.
Hay algo que me gustaría destacar. Hubiese sido sencillo hacer carnaza de todo esto y crear una película lacrimógena cebándose en el drama familiar. Cáncer, autismo, soledad, muerte... Sin embargo, la narración está muy lejos de todo eso. Todo lo contrario, diría yo, aunque no estaría de más tener unos Kleenex cerca. Por lo que pudiera pasar...
Recomendada.