(...) Es una pena que no se le dé más atención a Raya Martin.
Por empezar por el final: se la vamos a dar, estamos en ello.
Muy de acuerdo con todo en tu comentario. Yo terminé de encajar mejor la película al traducirla, porque tiene algo evanescente en la narración. Al verla por primera vez me quedé con la sensación de haberme perdido algo. Pero al traducirla comprobé que está todo ahí, tienes lo suficiente para montar un armazón coherente en la historia y con lo que te falta te desasosiegas. Es muy interesante ver que Raya demuestra la madurez en el género después de experimentar el medio y buscar una voz propia. Utiliza muy bien lo que no enseña, conoce los códigos del terror pero los lleva a su terreno, a esa voz propia que ha ido adquiriendo. No es lo mismo hacer una película como
Autohystoria, con una mala cámara digital, dos smartphones y tres colegas, que conseguir el empaque visual y emocional de
How to Disappear... y eso que
Autohystoria sigue siendo una de sus obras que más me han gustado, en parte precisamente por lo que tiene de experimentación del medio y de la narración.
Por supuesto, esta película es de horror porque la realidad es horrible. Y las expectativas, aciagas.
Vamos a seguir investigando este camino de la madurez de Raya Martin demostrada en clave de género, porque estamos preparando
Smaller and Smaller Circles, un thriller de época... a la manera Martin.
Y por acabar por el principio:
De esta debía un comentario y allí va.
¡Un hombre de honor!