A Flame at the Pier, también conocida como
Tears on the Lion's Mane, fue la octava dirección de
Shinoda. Sería la segunda vez que el director formara grupo de trabajo junto a
Shuji Terayama , que co-guionizó la película, y
Toru Takemitsu, compositor musical. El primer trabajo de éste trío seria en
Dry Lake (1961).
Shinoda apostó acertadamente por los nuevos talentos de la Shochiku. Ese mismo año había empezado su carrera cinematográfica
Tamotsu Hayakawa, que en esta película hacía su cuarto papel, interpretando además a un personaje que casi sería un calco del que interpretaría un año después en
18 roughs (Yoshishige Yoshida, 1963). También serían los inicios del protagonista principal
Takashi Fujiki, que comenzó su carrera en 1961 y ésta sería su tercera película. Y dejo para el final a mi querida
Mariko Kaga, estáis ante
su primera película, ¡y qué primera película!
Aunque tiene destellos taiyozoku, no cuadra del todo en éste género. Se trata de un drama acerca de un joven lacayo que es el enlace directo entre su patrón y los trabajadores. Aunque ésta sería la base del argumento, hay muchos frentes abiertos. Por un lado está la mujer del patrón, interpretado por la bella
Kyoko Kishida, que debe saciar su deseo sexual con extraños a causa de la impotencia de su marido. Después tenemos a
Mariko Kaga, que interpreta a una camarera de la que, cómo no, se enamora el protagonista. Y por último tenemos a los protagonistas principales de los frentes abiertos,
Takashi Fujiki es el protagonista principal y lacayo del empresario, y
Tamotsu Hayakawa el cabezilla del grupo de trabajadores. Por cierto,
Tetsuro Tanba hace un breve cameo.
Nada más que añadir, creo que es una cinta imprescindible por cuestiones históricas, y por supuesto, cinematográficas.
Sinopsis:
El joven Sabu trabaja en una empresa portuaria como lacayo del jefe, a quien profesa lealtad absoluta después de que éste le salvara la vida cuando tenía cuatro años. Cuando los trabajadores se declaran en huelga y empiezan a promover la creación de un sindicato, Sabu será el encargado de silenciar las protestas por medio de violencia, sin ser consciente de las terribles consecuencias que acarreará.