En cambio, a mí me ha dejado bastante frío (como en un momento de la película la chica le insinúa ser al protagonista); estoy de acuerdo en que los personajes son agradables y tiernos, que no hay exceso ni abuso del melodrama (de hecho, lo sortea de forma muy notable pese a los temas tratados), pero todo me ha parecido manejado con demasiada ligereza, sin mojarse demasiado, sin profundizar, pasando muy de puntillas, y la historia daba para mucho más de haber sido más osado el director, aunque imagino que ahí entrarían las expectativas del público al que se dirige.