Es curioso como directores en su momento esenciales ahora mismo pasan completamente desapercibidos. Y lo más curioso todavía es que su recorrido es inversamente proporcional a su resultado. Quiero decir que se seguía más a Chen Kaige (al menos fuera de China) cuando hacía películas pequeñas (Tierra amarilla, El rey de los niños, hasta Adiós a mi concubina) que cuando anda empeñado en reventar taquillas. Pero lo cierto es que las taquillas las revienta, con mayor o menor interés. Esta película se llevó unos cuantos premios técnicos en los Asian Film Awards (efectos especiales, dirección artística, vestuario,...) y no deja de intrigarme (más de lo que han hecho películas suyas anteriores, que es nada).
Bueno, solo quería decir que hay subtítulos en inglés, lo cual no sé si es una noticia nueva (en la ficha no estaba indicados, en todo caso). Eso y que Chen Kaige vive
.