¡Qué gran guión! Con una historia tan buena, mucho tenía que torcerse la cosa para salir mal, y más teniendo en cuenta quién dirige. Excelente la fotografía, las interpretaciones, el montaje; en fin, todo. Me ha gustado mucho. Pertenece a esa categoría de películas en las que, una vez los fotogramas aparecen en la pantalla, te olvidas de todo lo demás, y la historia que estás viendo lo ocupa todo. Para mí, eso es probablemente lo máximo a que puede aspirar cualquier narración.
Muy recomendada.