Mi gran admirado
Kinnosuke Nakamura asume tres roles distintos en tres historias cortas cuya novela original son de
Shugoro Yamamoto, autor de novelas que han servido de inspiración en obras tan consagradas como
Sanjuro (1962) y
Barbarroja (1965) de
Akira Kurosawa o
Kill! (Kihachi Okamoto, 1968).
Como grandes alicientes destaco la música del legendario
Masaru Sato y la preciosa fotografía de
Masahiko Iimura. Particularmente la primera historia me ha parecido la mejor, aunque las demás también son interesantes. Cada historia dura aproximadamente una hora con lo que os recomiendo que la veáis por separado ya que no siguen ningún tipo de linealidad. Si véis la película seguida os puede resultar algo pesadas las tres horas de metraje, a mi me ha pasado.
Sinopsis:
Hiyameshi: Daishiro es el hijo menor de cuatro hermanos cuya admiración por la literatura hace que sus estanterías estén plagadas de libros. La narrativa es su único refugio ya que al ser el menor de una familia modesta le es imposible contraer matrimonio con la chica de sus sueños. Su gran pasión por la literatura llega a oídos del mismo Shogun, quien lo reclama para solicitarle algunos de sus libros.
Osan: Santa es un carpintero que viaja por Japón buscando a su esposa desaparecida. Tiempo atrás, Santa la dejó después de que ella susurrara otro nombre durante el acto sexual. En su largo viaje, Santa conocerá varios hombres que lo guían hasta el verdadero paradero de su mujer.
Chan: Jukichi es un artesano que se pasa el día bebiendo y lamentándose de los nuevos tiempos en los que a la gente no le interesa la artesanía de calidad. Un compañero de profesión le propondrá unirse a un grupo de antiguos artesanos pero Jukichi antepondrá el orgullo de artesano en contra de la responsabilidad con su familia.