Un poco larga creo yo. El personaje del chaval protagonista es desesperante en algunas escenas y te dan ganas de entrar en la peli y darle un par de tortas para ver si espabila.
Para mi gusto el personaje más interesante y al que más jugo se le podía haber sacado es el de la hija del promotor de ideas, el interpretado por Seki Megumi.
Por momentos uno tiene la sensación de que la peli, más allá de la historia que cuenta, parece que realmente ha sido financiada por el organismo turístico de la prefectura real.
Una peli para ver y olvidar, la doy Ver si no hay otra cosa. 5/10 y creo que soy generoso.