Mmmm... a mi la duración no me molestó... nunca le he pedido a una película que sea buena "narrativamente" porque la narración no es lo que me interesa del cine.
Ahora bien, Thirst me pareció muy floja. Ninguna película de Park me termina de convencer debido a sus excesos, especialmente a esa necesidad de exagerar todos los sentimientos, tanto que en ocasiones me parece que cae en el ridículo. Aparte de eso, Thirst me pareció una película fea, incapaz de retratar el amor. No entiendo por qué, cada vez que se besan los dos protagonistas, el director tiene que poner a todo volumen el intercambio de fluidos que se produce. Ese ruido de la saliva trasportándose de una boca a otra me pareció que marcaba una distancia entre Park y sus protagonistas, como si el director quisiese contar una historia muy emocionante pero no se implicara en ello. El mix genérico que se hace en Corea nunca lo he entendido. Sé que hay muchos cinéfilos a los que les encanta que las películas pasen de la parodia extrema al drama más profundo, pero para mí es algo que hace daño tanto a la parodia como al drama. En Thirst hay momentos enormemente románticos (hay varios, el que más me gustó, la pelea en las azoteas)destrozados por la aparición de lo ridículo, como el fantasma del antiguo marido que se les aparece con una mueca ridícula y un moco colgando de la nariz. A mi esos excesos me hacen salirme de la película, me rompen esa relación masoquista que podría haber sido la película. Parece que Park tiene miedo a crear algo realmente bello y opta por el camino contrario, crear algo feo, muy feo. No estoy en contra de que las películas tengan drama y comedia (Ford, Ozu, qué más decir), pero sí a que las partes dramáticas se vean contaminadas por lo cómico. En el final de Thirst, aparentemente romántico y bellísimo, aún encuentra sitio Park para hacer una bromilla.
No me interesa. Aunque desde luego como mixtura de géneros no tiene rival.