No estoy en absoluto con que Hark no cuenta nada (o no importa) y todo es forma... Eso es un poco frívolo para el director de Don't play with fire (prohibida por anarquista). Sólo hay que ver A better tomorrow III para darse cuenta de que Hark si que cuenta cosas (en comparación con las dos de Woo, el cual si que es un manierista puro y duro), y que además no lo hace de cualquier manera. La forma tiene su importancia, pero suele estar supeditada precisamente a qué quiere contar (por eso sus películas no son estéticamente similares y ni tan siquiera suelen tener unos puntos de conexión entre sí, excepto si están en el mismo género). Por ejemplo, toda la primera parte de su cine se basa en un nacionalismo chino (que huye de lo foráneo), que le lleva a rodar Érase una vez en China y demás y reconstruir esa China en toda su magnificiencia y escrupulosamente. La forma oculta (o no) una verdadera intención. Realmente hasta tal punto es importante lo que cuenta, que Woo es el sucesor formal de Chang Chen (manieristas ambos), mientras que Tsui Hark lo sería de King Hu, en el que las películas son un complejo entramado de intereses. Otra cosa es que se pueda ver sin preguntarse demasiadas cosas, pero eso se puede hacer con cualquiera.
En cuanto a la comedia cantonesa es eso, comedia cantonesa. Si no le gusta a uno la comedia cantonesa no es culpa de Tsui Hark ni de Shanghai blues. Es simplemente que ellos son así jeje .