jidaigekipedia.comCamino del infiernoSinopsis: Tatewaki Miura, chambelán del Clan Kakegawa, encarga a Ogami que elimine a Gemba Sawatari, el hombre que provocó mediante su traición la abolición del clan y la muerte de 400 samuráis. Poco después es el propio Gemba quien solicita los servicios del lobo solitario, esta vez pidiendo la muerte del gobernante de Edo; Lord Itakura. El dilema de nuestro protagonista queda planteado: ¿debe matar a Gemba y cumplir con su palabra de sicario? ¿O por el contrario debe matar a Itakura en venganza por su tormentoso pasado? Como veremos, lo que parece una dificil elección se convierte en algo trivial.
Misumi cambia el esquema de juego en
Babycart to Hades dejando a los Yagyu al margen de la historia, mostrándolos tan sólo al final para recordar al espectador que siguen estando ahí y no se rendirán jamás. La ausencia de los archienemigos de Ogami provoca un vacío en el metraje que va desde el inicio hasta que se contratan sus servicios. Pues bien, como reemplazo volvemos a la tónica de
Sword of Vengeance para vernos envueltos en una breve historia de violaciones y prostitutas que provocará el enfrentamiento con los Bohachimon, un grupo yakuza dirigido por una mujer de recio caracter. En esta parte de la película tendrá lugar la habitual muestra de fuerza física y mental del lobo.
En el terreno de la acción disfrutamos de mejores coreografías que en las entregas precedentes, pero dando mucho peso a las armas de fuego. Dos de los rivales más poderosos de Itto Ogami son expertos tiradores, por lo que se verá obligado a servirse de Daigoro para tenderles emboscadas. Tomisaburo Wakayama sigue luciéndose con sus cabriolas de muñeca (katana en mano) y su naginata preferida, pero ni eso será suficiente para superar al ejército de ronin, samuráis, caballería, arqueros y mosqueteros, al que debe hacer frente en el camino a su presa.
Como valoración final decir que la primera vez que vi la saga me pareció la mejor de las seis. Si bien en este momento no recuerdo muy bien las tres siguientes, puedo decir sin titubear que al menos es muy superior a las dos anteriores. Kenji Misumi evita caer en la rutina con nuevos personajes, nuevas situaciones, y muchas sorpresas capaces de amenizarnos la tarde. Un imprescindible del chambara puro.