Me da pena decirlo, pero creo que ha sido una oportunidad perdida para hacer una película memorable. La primera parte de la película es estupenda, centrada en una intriga "palaciega" y en unos juegos de magia soprendentes, bonitos, apoyados en unos efectos especiales muy naturales. De hecho, casi casi
copia homenajea el esquema argumental de la película "El Ilusionista" (2006) con Tony Leung haciendo el papel de Edward Norton. Tenemos el comienzo de las representaciones de magia de escenario en el teatro local, la intriga política, la invitación para actuar delante del mandamás, la mujer pretendida por el Jefe y por el Mago,... Y por desgracia, a partir de la segunda parte, todo ello empieza a diluirse en una serie de escenas tontas, ñoñas, con hilos argumentales sin interés, con lagunas de guión, en aras de una pretendida hilaridad que, a mí por lo menos, no me ha hecho gracia ninguna, y si he sonreído en más de 2 escenas ya habrá sido demasiado.
Podía habérsele sacado mucho partido a esos juegos de magia, ese "estado del arte" de la magia a principios del siglo XX en China, de la misma manera que se mostraba en "El ilusionista" o en "El Truco Final (El Prestigio)", pero inexplicablemente decidieron encauzar la película a un vodevil tontaina que termina por dejar una sensación de ni-fu-ni-fa
. Para colmo, los FX empleados en la parte final son en los que más se nota que el ordenador anda por en medio, lo que lastra aún más la decadencia acometida con decisión por el director y los guionistas
.
No cabe ninguna duda, entonces, de que lo mejor de la cinta está en su primera parte, en la espectacularidad de sus decorados, la escenografía lujosa, y los juegos de magia, y sólo por esos se merece dedicarle una ojeada. A partir de ahí, todo lo demás es superfluo. Si hubieran decidido continuar por una senda más seria, más profunda; si se hubieran decantado por el trasfondo de los personajes y no por el slapstick; si el guión fuera más intrincado, más centrado en esos trucos de magia y menos en las gracietas porque sí, estaríamos hablando de un film situado mucho más arriba en la escala. Pero no pudo ser, la alternativa china a las recientes películas occidentales sobre el mundo de la prestidigitación tendrá que esperar una mejor candidata
.
No obstante, es justo señalar que las actuaciones de los dos protagonistas son muy buenas. Tony Leung es siempre un valor seguro, que pena que no haga películas más a menudo. Pero creo que incluso mejor está Lau Ching-Wan, que borda su papel. Lástima que un personaje sin un guión inteligente no puede pasar a la historia.
En consecuencia,
Ver si no hay otra cosa, o bien
Ver... sólo la primera parte.
Versión:
theonlyh. Buena imagen, no creo necesaria una resolución mayor, ni que merezca la pena.
Subtítulos existentes: buenos.