Si nos quedamos en las escenas de artes marciales (magníficas) y en cómo está rodada pues es una película muy disfrutable. Si ya nos vamos al argumento, sobre todo a partir de cierto momento, a la mitad, aprox., pues yo diría que a cada minuto se vuelve más y más aberrante, de una absurdez tremebunda y la única forma de abstraerse de ello es disfrutar de la acción, pensar en ella cuando no la hay o no pensar en absoluto. Y el final me parece totalmente complaciente.
Si uno es muy aficionado del género, y no muy exigente en otros aspectos, la disfrutará mucho. En otro caso la disfrutará bastante menos. Ver (por las coreografías, que son muy buenas).