Si durante la primera mitad de los 80 todavía tenían su gran tirón las películas de kung fu (sobretodo en forma de comedia), durante la segunda mitad de esa misma década las películas de acción se consolidarían en lo más alto a raíz de grandes éxitos como A Better Tomorrow o Police Story. Y es que para alguien que vivía en Hong Kong durante los años que van de 1986 a 1989 y que además le gustase el género de acción era como estar en el mismísimo cielo, ya que se podía ir al cine 2 o 3 veces por semana a visionar una película de este género.
Dentro de este tiempo se encuentra Sworn Brothers, una película que mezcla temáticas vistas en múltiples ocasiones pero que en aquella época quizás eran algo más novedosas. En ella Andy Lau es un miembro de las tríadas locales. Un día su amigo de toda la vida vuelve de formarse como policía de Inglaterra y claro le toca precisamente investigar un caso en el que su gran amigo se encuentra directamente involucrado.
La película fue dirigida por David Lai, que como muchos se formó y aprendió en la televisión, en este caso la RTV. Sus maneras de hacer enseguida llamaron la atención de Johnny Mak, el cual lo contrató para su productora en 1981. Desde entonces a dirigido películas como Possessed 1 y 2, Runaway blues o la que nos ocupa. En el caso de Sworn Brothers trabajó para la productor de Sammo Hung cosa que se nota en las escenas de acción, dirigidas por el propio Sammo Hung y las cuales son especialmente violentas.
En definitiva, una película más a destacar de entre las centenares que se hicieron en la que considero la mejor época del cine hongkonés.
