Vista la segunda parte o segunda tanda de historias.
Aunque siguen siendo historias de fantasmas, hay un cambio notable.
Está claro, son otros nombres, otros directores.
Decir que Teddy Robin hace igual que Simon Yam en la primera parte, dirige y actúa. Y Teddy Robin es un notable del cine hongkonés. Una de esas figuras de otras épocas.
Y además lo tenemos en el segundo episodio a quien sanfulgencio nombra como Lau Kwok Chenog. Que dicho así, no dice nada, pero resulta que se trata de Lawrence Ah-mon.
Sí, Lawrence Ah-mon. Aquel de Spacked Out, Lee Rock 1 y 2, Gangs... si bien su última película como director es de hace 3 años (Dealer Healer) y el año pasado anduvo en The invencible dragon,
Lawrence Ah-mon no se prodiga mucho en su faceta de director. Lo que es una pena, y por eso es un acontencimiento encontrarse con algo suyo.
Y se nota su mano.
La primera historia es un dechado de maldad y moderada mala leche (¿existe eso?
) la segunda parte es la Ah-mon que tiene un ambiente particular por cierto. Se siente el frío le inframundo.
Y luego el segmento de Teddy Robin que parece tomar un poco del ambiente de las historias que la preceden y crea un gran broche de oro. Muy divertido.
En total, un buen conjunto de historias de fantasmas para ver de manera acorde.