Dirigida y protagonizada por R. Parthiban, este thriller de investigación Tamil tiene como curiosidad que solo cuenta con un actor en pantalla. Toda la acción se desarrolla en una sala de interrogatorio donde se investiga un caso de asesinato. La cámara solo enfoca al sospechoso, quedando todo lo demás fuera de plano, solo con voces y efectos de sonido.
Parthiban debe mantener toda la película a base de su guión, lleno de giros y recovecos, y de una interpretación muy particular de un hombre que decide interpretar las narraciones que cuenta a la policía.
Una cinta bastante curiosa.