Me daba miedo verla porque las otras dos que he visto de este director me resultaron insoportables... pero esta sí me ha gustado. Estéticamente, una pasada. Tiene una belleza visual del copón bendito.
En lo demás... pues está bastante bien, sin ser ninguna maravilla. Bastante entretenida, aunque a ratos se hace larga.
Y a mí también me ha recordado a Ghibli, claro.