Me parece que la película tarda demasiado en centrarse en lo que verdaderamente quiere contarnos, y la historia, por culpa de esto, avanza un poco a trompicones hasta que se enfoca en la segunda mitad. De todas formas, el gran Ken Takakura, unas localizaciones preciosas de Hokkaido y un buen trabajo de las actrices secundarias la hacen interesante, pero me he quedado un poco a medio camino; pensaba que me gustaría más y sin embargo solo me ha resultado correcta, pero sin llegar a emocionarme en ningún momento.