Anda, pasan dos años y medio y parece que me voy a contestar a mí mismo
Pues esta peli (docu) merece mayor atención y aplauso, oigan
Este mediodía la he vuelto a ver. ¿Tendrá alguna vez subs? Creo que el día que llegue a tenerlos, me dará la sensación de que estropean el visionado de esta pequeña maravilla. Qué delicia visual, y qué bien acompañada, con ese piano de pseudo-ragtime en la primera mitad, como si fuese una peli de cine mudo, como si Hani hubiese sabido que este documental iban a verlo en la tierra del sol poniente algunos paletos ignorantes del nihongo como servidor de ustés, paletos que ven esta peli como si muda fuera, porque de lo que cuenta la narradora entienden, en el mejor de los casos, tres o cuatro palabras (ichiban, kodomotachi..., poquito más, en mi caso).
Quizá resulte excéntrico mi comentario, pero para mí ver este documental es una experiencia alucinatoria, un poco como la primera vez que vi Eraserhead, pero aquí de buen rollo; vamos, que me pongo casi flowerpower viendo a estos niños a su bola jugando, hablando, obedeciendo, desobedeciendo, atendiendo, distrayéndose
Hoy lo que estaba pensando es que me parecía que estos niños eran de clase baja. Y en el último tercio del film, Hani y su compañía se dan un paseo en efecto por casas cuasi-chabolistas a ver cómo viven los niños donde viven, más allá del cole. Aquí es seguramente donde mejor iría lo de unos subs para saber qué es lo que Hani nos quiere contar. A mí en todo caso me sirve de antídoto para los excesos lisérgicos previos, regreso a la cruda realidad y me corto la melena hippy que me estaba saliendo con tanto buenrollete y tantos laughing Sunday's children
Bueno; paridas aparte: me encanta este documental. A ver si veo pronto el otro, el de los niños que dibujan.
Aprovechando, he restaurado la imagen en la ficha, pues estaba shack-caída