jidaigekipedia.comEl luchador mancoAquí tenemos a Kimiyoshi Yasuda de nuevo a la dirección de Zatoichi, para presentarnos la que quizás sea la apuesta más complicada y arriesgada de toda la saga. Seguimos un poco en la línea de las dos ultimas, donde tuvimos como invitados especiales primero a Toshiro Mifune y luego a Tatsuya Nakadai, para traernos esta vez a Yu Wang, el actor chino que interpretaba al luchador manco en
One Armed Swordman.
Sinopsis: un matrimonio, su hijo pequeño, y un hombre al que acaban de conocer, todos de nacionalidad china, se apartan del camino para ceder el paso a un desfile oficial. Al llegar a su altura el chico pequeño se atraviesa en la calzada, y cuando los samurái intentan castigarle, sus padres se interponen y son asesinados. Para no dejar testigos, los miembros de la procesión eliminan a los caminantes de los alrededores y acusan al luchador chino de todas las muertes.
La introducción de personajes extranjeros desconocedores del idioma produce un cambio completo en el desarrollo de la película, buscando comicidad en las dificultades que encuentra Zatoichi para comunicarse con ellos. La traducción a nuestro idioma conserva en buena medida la gracia de los diálogos, pero sin duda en original japonés las escenas deben de ser mucho más divertidas.
Las coreografías de
Zatoichi meets the One Armed Swordman bien podrían contarse entre las más rápidas de toda la colección. El bastón del masajista se mueve como un rayo de un enemigo a otro, minimizando los siempre irreales momentos en los que los oponentes esperan su turno para intervenir en la refriega.
Como buen amante del cine clásico de kung fu y wuxia, las escenas de lucha de Yu Wang me han gustado bastante. Aunque también es cierto es que cuando las sacamos de contexto, y las metemos en medio de un chambara, pierden casi todo su encanto y llegan a parecer un poco ridículas. En cualquier caso el enfrentamiento con Zatoichi es de los más largos de la saga, y también de los más interesantes.
La idea de Yasuda era complicada y la ejecutó con acierto. Muy pocas veces tenemos al alcance de la vista un "crossover", al más puro estilo de los comics de Marvel, que ponga juntos a dos personajes pertenecientes a distintos géneros, de distintas nacionalidades, con distintas discapacidades, y empleando estilos de lucha diferentes.