He aquí, después de mucho tiempo esperándola, una de las obras cumbre del pinku eiga japonés, Ichijo's Wet Lust, que también se conoce como Ichiro Sayuri: Wet Lust y recientemente KINO la ha editado como Ichijo Sayuri: Following Desire.
La película fue la consagración definitiva de Tatsumi Kumashiro, que hasta entonces había tenido problemas para acceder a la dirección debido a los temas subversivos de su primera película, Front Row Life, que al igual que Ichijo Sayuri trataba sobre las vivencias de una bailarina de striptease. Sin embargo, el panorama en el cine japonés había cambiado. En 1968, las
majors japonesas tenían una política muy dura contra cualquier escena que resultase obscena y contra temas relacionados con el sexo y la violencia. Sin embargo, con la llegada de la televisión y la crisis de espectadores, la Nikkatsu entró en graves problemas económicos y decidió dedicar toda su producción a la realización de películas de género rosa de bajísimo presupuesto, que denominó pomposamente como Roman porno. Y así fue cómo las salas cinematográficas de Japón se llenaron de películas sobre sadomasoquismo, humillación femenina (y masculina en muchas ocasiones) y sexo de todo tipo.
Ahí tuvo su oportunidad Kumashiro, que ya con 44 años consiguió volver a dirigir películas, y de qué manera. Entre 1972 y 1980 (la época dorada del Roman porno, hasta la llegada del video) dirigirá 24 películas, convirtiéndose en el rey de la Nikkatsu e incluso a ser denominado por un crítico de Kinema Jumpo como el director japonés más importante surgido en la década de los 70. En sus películas suele haber dos temas fundamentales: el amor por el cine y la reivindicación de la figura de la mujer en un contexto adverso como era el Japón de la época. Respecto al primero, realizará una comedia genial llamada
Black Rose Ascension, un film metalingüístico que trata sobre un director de cine pinku (parodiando a Nagisa Oshima) que encuentra en una visita al dentista (esto es una cita a
Daydream, el clásico de Tetsuji Takechi) a la mujer de sus sueños, sin saber si confesarle su amor o convencerla para ser la estrella de sus películas. El cine de Kumashiro está lleno de humor y de momentos transgresores. Su estilo es sucio y realista, incluso a veces parece descuidado. En eso se diferencia de otros directores importantes del género, como Masaru Konuma (director del
Flower & Snake original y especializado en temática sadomasoquista), Noboru Tanaka o el pionero Tetsuji Takechi. Debido a esto, el erotismo de su cine podría considerarse culpable, incluso desagradable. Mientras otros directores de la Nikkatsu utilizan el sexo como metáfora o como un placer pervertido, en el caso de Kumashiro se trata de un ataque al espectador, que llegará a su cumbre en la escena de violación homosexual de
Woods are Wet (Onna jigoku: mori wa nureta, 1973), película basada en el Justine de Sade.
Con
Ichijo's Wet Lust, la película que os traigo hoy, Kumashiro asentó las bases de su estilo. Un realismo casi rozando lo documental, en parte por convicción, en parte por los mínimos medios de producción con los que contaba. La película es un crescendo sexual constante, que empieza como algo erótico y placentero y termina como humillación y violencia. Como curiosidad, añadir que Kumashiro autocensuró su película para protestar contra los cortes que realizaban los censores japoneses en el género pinku. Como sabéis, mostrar los genitales es delito en Japón, así que para evitar estos problemas, los censores cortaban escenas, o bien las recortaban, oscurecían o atenuaban las partes comprometidas. Escandalizado por estas prácticas, Kumashiro editó él mismo la película para mostrar cuán ridículo era este tipo de prácticas (tenéis un ejemplo en la primera captura).
En fin, que espero ofreceros más pinkus en los próximos días, tanto de Kumashiro como de otros maestros del género. El ripeo que traigo aquí es original mio, así que va a subir muy mal, ya que estoy compartiendo demasiadas cosas. Por eso me gustaría saber si alguien me animaría a ayudarme a compartir. Yo le pasaría la película por otros medios y así podríamos distribuirla más rápidamente en el emule. También hay otra copia en el emule, con subtítulos incrustados en francés, a la que es probable que le vayan bien estos subtítulos, así que quizás le haga una ficha.