Pues vista, la película deja clara sus ambiciones e intenciones nada más empezar, distraernos un rato, no aspira a más y eso si creo que lo consigue.
Típica película de sobremesa para ver en un rato en el que no queramos comernos la cabeza, algunas poses bonitas, algún desenvainado de katana fulgurante, el bueno y los malos, poco más.